¡Hay quienes piensan que los videos ayudan a los que vender!
Hay quienes piensan que los videos ayudan a los que venden. Y es cierto si no comprendes todo lo que significa tener la herramienta más poderosa del mundo para contar historias, para crear mundos, para acercarte a las masas y hacerlas parte de tu universo. Y es que el video y su matrimonio inigualable con las redes sociales llegó para cambiarnos la forma de ver el mundo, para dejar a un lado la publicidad tradicional. Para disparar el homo narrator que hay en nosotros y que nos permite ser.
Y si, el video ha estado con nosotros para hacer publicidad, para impulsar marcas, y lo ha logrado. Pero hoy, después de vivir una pandemia, de tener un celular en el bolsillo, de aburrirnos con la señal abierta de televisión que nos embute comerciales y no nos deja escoger cuándo queremos ver lo que nos gusta, es hora de entender por fin la forma en que consumimos, en que amamos las marcas, en que nuestras formas de consumo se transforman y ya no estamos esperando simplemente ir a que un vendedor nos atienda en una tienda.
No, hoy buscamos otra forma, de acercarnos a la marca que no sea el comercial y de comprar que no sea el vendedor. Y mientras quienes lo han entendido suben y suben en su posicionamiento y sus ventas, otros siguen insistiendo en la vieja fórmula de los comerciales, de los medios tradicionales, de dar un paso tímido a las redes sociales bajo una ansiedad que les destruye el algoritmo. Haciendo ahorros en redes para gastarse millones en fórmulas vencidas.
Con Almagina buscamos que a las marcas les vaya bien y acompañarlas en este cambio, y no hablar de campaña, nunca más, es hacer estrategias narrativas, creación de contenido permanente, dar contenido de valor, no suplicar por compras o invadir.