Las nuevas campañas políticas
Amaneces un día muy feliz y de repente ves en la calle carteles con rostros de completos desconocidos, rostros gigantes en vallas, rostros que invaden tus redes sociales. Rostros con frases recicladas: Es el momento del cambio, es el tiempo de la gente, es la hora de la transformación, Menos impuestos, más empleo. Y vas en la calle y se te acercan personas agotadas de sonreír a darte la mano mientras te toman fotos, te entregan banderines, volantes, mientras alguien grita por un megáfono y un grupo musical intenta mantener el ritmo.
Si, llegaron los frutos de la democracia, el tamal y la lechona, el desfile de “líderes y liderezas”, de las promesas, de abrazar al pueblo, han llegado las elecciones y con ellas las campañas políticas. De hecho me pregunto. ¿Qué pasará con los abrazos al pueblo en plena pandemia?
Comienza entonces este sufrimiento para los ciudadanos. Candidatos ansiosos por tus votos prometiendo imposibles y un ejercito de personas que anhelan un puesto prometido.
La contaminación que genera una campaña no es poca y la experiencia de todos los que vivimos en la ciudad es sumamente incómoda, invasiva, y todo este esfuerzo al final resulta inservible para los candidatos, así las costumbres les diga otra cosa.
Pero entonces ….
¿Cómo se debería hacer una estrategia de campaña política en un mundo digital?
En un mundo de medios de comunicación tradicionales las campañas tenían toda la cabida, pues estos medios tenían espacios costosos a los cuales era imposible que una empresa o un pudiera aparecer de forma constante con contenido fresco, así que mejor guardar el ahorro y el esfuerzo solo para la campaña.
Por otro lado casi la única forma de tener más apariciones en época no electoral era ser noticia en los informativos o noticieros, para lo cual se debía cultivar una relación con los directores o periodistas, representar intereses de los grupos económicos dueños de los medios de comunicación y/o tener una estrategia de free Press a manos de un experto.
Pero con el desplome del rating de estos medios en el mundo digital y con la oportunidad de tener canales de comunicación constantes y propios, se hace necesario otro enfoque. Una dinámica que permita intercambiar ideas, promover o construir un ideario, cautivar votos futuros y consolidar un liderazgo cercano, con mecanismos más participativos y representativos.
Campaña política sería entonces ¿Innecesaria?
Siendo consistente en esta interacción, la campaña sería, básicamente, innecesaria. Bueno, claro que hay algunos matices en esto que digo, pero el esfuerzo no debería concentrarse solo en unos meses, debería ser un proyecto constante y coherente.
Y con esto no me refiero a salir a hacer lives semanales, trinar todos los días, cazar peleas públicas en redes sociales o publicar una columna de opinión al mes.
Se trata, para comenzar, de hacer la política más divertida, más cercana para la gente. El político debe ser un personaje con una forma de pensar, con un proyecto:
- ¿Cuál es ese proyecto?
- ¿Cuál es el sueño que invita a construir?
- ¿Cómo ha comenzado a construir ese sueño?
- ¿Cómo sería el plan para hacer que las cosas pasen?
- ¿Cómo puedo sumarme a eso?
Se debe construir un político que haga las veces de profesor y explique los problemas y posibles soluciones, que entable diálogos públicos con expertos y otras corrientes políticas, que haga las veces de investigador buscando encontrar la solución más satisfactoria para las partes involucradas.
Que abra espacios para el diálogo con la ciudadanía. Pero que también emprenda acciones colectivas, simbólicas y que den ejemplo, más allá de una foto oportunista para aparentar.
Creación de contenidos para campañas políticas
Si te estás preguntando cómo lograr eso en forma de contenidos, acá te tengo tres opciones, pero las opciones que tienes son montones.
- Creación de videos para redes sociales donde, al menos, dos veces a la semana explique de la forma más pedagógica posible un problema que se asume y las posibles soluciones para abordarlo, mostrando gráficamente su ruta a seguir.
- Crea un Podcast donde se aborde un tema con un experto u opositor político, un diálogo de posibles soluciones o miradas encontradas al rededor de un problema.
- Crónicas en video de acciones emprendidas con la comunidad para dar soluciones a problemas cotidianos.
Se deben construir políticos más transparente y coherentes entre lo que cuenta y lo que se hace.
Así que si eres político o asesor de comunicaciones, tienes dos caminos, el de la desgastante ruta de la campaña política tradicional y la aceitación permanente de maquinarias, o el de la consolidación de un liderazgo permanente a través de comunicación enfocada en pedagogía ciudadana, participación y acciones colectivas relevantes.
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Nos vemos en el próximo episodio.